2018

ENERO 2018

Mièrcoles 10 de enero de 2018 – Mensaje de la Santìsima Virgen Marìa (Milàn)

 La Santìsima Virgen Marìa se apareció a Michelino luego de la oración por los difuntos. Ha permanecido en oración con los fieles y después de un tiempo ha dejado el siguiente mensaje:

“Queridos hijos, gracias al infinito amor y perdón que Dios Padre Todopoderoso tiene por toda la humanidad, aquí estoy. Hijitos, hoy les invito a ustedes, los aquí presentes y a toda la humanidad, las oraciones que donan por la paz, hoy les invito a que estas oraciones sean específicamente por todos los jefes de gobierno, a quienes invito a la reflexión, a la paz, al amor; no al odio, a sangre inocente (luego de estas palabras, la Virgen ha iniciado a llorar). Invito a la humanidad a donar estas oraciones con el corazón, con amor, a creer, a la confianza total. Hijitos, llegaràn tiempos difíciles, por esto les invito siempre, en estos días de gracia, que pronto terminaràn, a escuchar estas palabras que Dios Padre Todopoderoso dona a sus propios hijos sobre esta Tierra. El Hombre ignora: el pecado envuelve la humanidad cada vez màs, la confianza en mi Hijo es cada vez menor. Invito a nuestros hijos que creen, aman, adoran Dios Padre Todopoderoso a perseverar, a perseverar con todo lo que se les pide y los invito a no temer. De nuevo, otra vez invito a las jóvenes familias que todavía no se han unido con el vìnculo del matrimonio en la casa de mi Hijo, los invito a acceder lo antes posible. Invito a no llevarse consigo dentro el propio corazón el aguijòn del pecado, a liberarse. Invito a todos los jóvenes, chicos y chicas a obrar en la caridad, a buscar el amor de mi Hijo, no al odio. Hijitos, vacíen sus corazones, deténganse a reflexionar, al amor que dona mi Hijo, un dìa puede que sea demasiado tarde. Es sòlo un reproche de Madre, de Padre, a la salvación, no lo olviden. Hijitos, nuestro amor por ustedes es inmenso, pero el corazón sobrecargado con el pecado, no les permite de hacer entrar en el corazón este amor, por esto les pedimos de abandonarse a la voluntad de Dios. Dejen de lado todo lo que està de màs y busquen el amor para la vida eterna; abandonarse es fe, es confianza, es creer que nadie està solo en esta tierra, si asì lo desean nsotros estaremos junto a ustedes sea en la alegrìa que en el sufrimiento para donarles amor y apoyo. Hijitos, los invito a la perseverancia con lo que ya hacen, a las oraciones del domingo por los que sufren en el cuerpo y en el alma. Crean en lo que donan, nada se perderà. La oración donada con sinceridad, no lo olviden, es un arma poderosa que los Hombres no comprenden. Tantos son los hermanos y hermanas que a través de la oración han dejado este mundo con el amor de mi Hijo en su corazón, gracias a la oraciòn y agradezco a todos nuestros hijos que se donan a esto. Gracias, gracias, gracias de haber respondido a mi llamada. Padre, Padre, Padre, tu que buscas tus hijos uno a uno, por la propia salvación, manda tu Espìritu Santo de anuncio, de amor, Espìritu de sabiduría.  Padre, Padre manda tu Espìritu Santo, sopla sobre ellos, Padre tu que donas amor y pides la paz para sus propios hijos, manda tu Espìritu Santo de paz. Sopla sobre ellos, sopla con potencia. Gracias Padre, gracias. Yo como siempre, mi amor infinito de Madre lo uno al de mi Hijo, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espìritu Santo. Hijitos, lo digo a los aquí presentes, les invito a sacar cualquier peso que cargue su corazón, de modo que puedan sentir dìa a dìa el amor de mi Hijo.  Agradezcan, alaben Dios Padre Todopoderoso luego de que me ausente porque su amor es infinito, acéptenlo y se cansen de anunciar su Palabra, Palabra de salvación.  No teman porque nosotros estaremos junto a ustedes. Gracias, gracias, gracias. Amen y perdonen.”

Mièrcoles 24 de enero de 2018 – Visiòn y mensaje de la Santìsima Virgen Marìa (Milàn)

Michelino luego de la oración del Santo Rosario ha tenido la visión de la Virgen Marìa que estaba rezando con las manos extendidas sobre los fieles en señal de bendición. Los fieles presentes parecían todos reunidos en un grupo màs unido en relación a la disposición real y de la boca de la Virgen salìan palabras que Michelino no lograba distinguir.  Despuès de esto la Virgen Madre ha dejado el siguiente mensaje:

“Queridos hijos, gracias a la infinita bondad, amor, misericordia de Dios Padre Todopoderoso aquí estoy, aquí estoy en su nombre para agradecerles.  Gracias a todos nuestros hijos que creen, aman, adoran Dios Padre Todopoderoso con corazón sincero y con plenitud, amor y confianza. Hijitos, invito a todos nuestros hijos que creen en nosotros de perseverar con el perdón y a donarse al amor. Hijitos, la palabra “amor” quiere decir donar cuando se recibe odio, incomprensión del propio hermano o hermana, sobre todo en los conyugues. Hijitos, cuando en ustedes se presentan momentos de desilusión por todo lo que los rodea, a partir de la propia familia, èste es el momento de alzar los ojos al cielo y pedir la fe en mi Hijo, èsto es cuando les pedimos “confianza total”!  Solo asì el corazón podrá recambiar amor por odio. Perdòn, sufrimiento, dònenlos siempre con amor. En estos tantos años de gracia, nuestros hijos han podido recibir palabras donadas por mi Hijo, tiempos de gracia, tantas las almas salvadas para la eternidad, al amor a mi Hijo, pero en todo esto no lo olviden que también està la “furia de satanàs”, a la división, al odio, a las incomprensiones y a todo lo que es tinieblas (inmediatamente después de estas palabras, la Virgen Marìa ha llorado y hacia el final del mensaje las làgrimas le surcaban el rostro con mayor intensidad). De nuevo invito a los jóvenes a buscar el amor de mi Hijo, no al espíritu de las tinieblas, al odio. Los invito a ser portadores de paz en la plena reconciliación al amor de mi Hijo. Invito a todas las familias a donarse amor, a no cansarse de donar amor.  Fuera el orgullo, la angustia, los celos. Todas estas palabras mencionadas: no son palabras de mi Hijo. Donde reina el odio, no es amor de mi Hijo. Agradezco a todos nuestros hijos que donan oraciones, amor con sinceridad.  Les agradezco a cada uno de ellos. Los invito a perseverar con todo esto, nosotros estaremos junto a ustedes.  El empeño que hoy pido a nuestros hijos es de alejar, a través de la oración, todo lo que son tinieblas. No se olviden hijitos que la potencia de Dios Padre Todopoderoso es insuperable, invencible. Les pedimos su empeño. Les renuevo todavía estas palabras, los tiempos de gracia están cerca, pronto terminaràn. Gracias por haber respondido a mi llamada. Padre, Padre, Padre manda tu Espìritu Santo de perdón, de amor.  Padre sopla con potencia sobre ellos. Padre, tu que los amas a cada uno de ellos, los escuchas uno por uno, los llamas uno a uno, manda tu Espìritu Santo, mándalo con potencia, sopla sobre ellos. Gracias Padre, gracias por lo que obras, gracias. Mi bendición se une a la de mi Hijo, los cubrirè con mi Manto uno a uno en el nombre del Padre, del Hijo y del Espìritu Santo. Hijitos no se cansen de perdonar y amar, acepten el sufrimiento del odio y serán recompensados. Gracias, gracias, gracias.”

 Mièrcoles 31 de enero de 2018 – Visiòn de la Santìsima Virgen Marìa (Milàn)

Luego de la oración del Santo Rosario, la Santìsima Virgen apareció en visión a Michelino y estuvo rezando junto a los fieles por un breve momento. Inmediatamente después la Virgen Madre le ha mostrado otra vez al Santo Padre de rodillas delante de un Crucifijo, el mismo lugar, el mismo ambiente como ya se lo había hecho ver en otras visiones. Le ha mostrado nuevamente pero con mayor precisiòn, hasta en los mínimos detalles, las dos estructuras, la gruta y la iglesia sobre el Santo Monte. Al final se quedó otro poco en oración junto a los fieles y antes de irse ha mandado un beso con las manos a todo el grupo.

 

FEBRERO 2018

Mièrcoles 7 de febrero de 2018 – Mensaje de la Santìsima Virgen Marìa (Milàn).

 La Virgen Madre apareció a Michelino en oración con los fieles, luego dejò el siguiente mensaje:

“Queridos hijos, gracias al infinito amor, bondad, misericordia y perdón de Dios Padre Todopoderoso, aquí estoy en su nombre para agradecerles.  Hijitos, agradezco especialmente a todos nuestros hijos que dan la disponibilidad a hermanos y hermanas que están sufriendo en el cuerpo y en el espíritu, sobre todo en estos días.   Hijitos, los invito a perseverar con amor, confianza a las oraciones, a las obras de caridad: abrir cada vez màs el corazón al amor de mi Hijo. Hijitos, a ustedes que donan estas oraciones con las intenciones sugeridas por mi Hijo, los invito a perseverar cada vez que se donan a la oración, les ruego que no falte la invocación “Virgen de la Cruz del Monte San Onofrio” (inmediatamente después de haber pronunciado estas palabras, la Virgen Madre ha iniciado a llorar, lo cual ha continuado hasta el final del mensaje). "Esta invocación debe perseverar. Llegarà el dìa en el cual en tantos corazones de nuestros hijos y en tantas mentes resonarà esta invocación al bien, para la ayuda de las almas olvidadas. Gracias por esto. Renuevo, otra vez: las almas olvidadas, completamente abandonadas, son un nùmero incalculable. Gracias a la misericordia de Dios Padre Omnipotente a donarse a mandar estas palabras a sus propios hijos instituyendo un Monte, una Cruz, que El ha elegido, invita a sus hijos a acceder a ella con amor y confianza total. No se olviden hijitos, mi Hijo se ha donado totalmente en la Cruz por la salvación de toda la humanidad. Les ruego, hijitos, crean firmemente en la misericordia en el amor de Dios Padre Todopoderoso. Cada vez que en la vida terrena se les presenta la situación de tener que llevar la propia cruz, los invito a llevarla siempre con amor, a alcanzar la Gloria Eterna sin sufrimiento. Yo, al pie de la Cruz de mi Hijo, oraba, conservaba en el silencio de mi corazón que todo se cumpliera según la voluntad del buen Padre Misericordioso. Les agradezco, a todos nuestros hijos que escuchan, meditan y obran estas palabras. Gracias, gracias, gracias. Invito a perdonar la incomprensión hacia estas palabras de parte de nuestros pastores. Invito a la humildad y a perseverar. Gracias de haber respondido a esta llamada. Padre, Padre, Padre, manda tu Espìritu Santo, tu Espìritu Santo de anuncio, de amor, de paz. Padre, aleja de ellos todo lo que los perturba. Padre, Padre, Padre de infinita misericordia, manda tu Espìritu Santo, mándalo con potencia, sopla sobre ellos. Gracias Padre, gracias por tu infinita bondad, gracias por tu Amor. Hijitos, les ruego, perseveren con todo lo que les ha sido donado, nosotros estaremos junto a ustedes. Tengan fe, Gracias, gracias, mi bendición se une a la de mi Hijo, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espìritu Santo. Amen y perdonen. Si al Amor, no al odio. Gracias”.

 Domingo 11 de febrero de 2018 – Visiòn de la Santìsima Virgen Marìa (Capilla del hospital de Cernusco)

Despuès de la oración del Santo Rosario, Michelino tuvo la visión de la Virgen Madre que ha permanecido en oración con los fieles. La Santìsma Virgen luego le ha mostrado doce o trece personas distribuidas en varios hospitales, todos en la cama, aparentemente a punto de morir, muy doloridos. La Virgen le ha dado a entender que estaban condenados a la perdición eterna. La visión de estas personas tuvo lugar en tres momentos concretos: mientras estaban en la cama, mientras estaban en la màs completa oscuridad y por último, el paso hacia la luz del purgatorio.

(Michelino menciona que pidió a la Virgen de evitarle de bajar en la oscuridad porque ya otras veces le había pasado y esto le provocaba un gran sufrimiento, un dolor, una sensación de angustia.  Ha dicho también que la luz del purgatorio se ve ensombrecida, parece niebla).

Mièrcoles 21 de febrero de 2018 – Mensaje de la Santìsima Virgen Marìa (Milàn).

La Santìsima Virgen Marìa primero estuvo rezando con los fieles y luego dejó el siguiente mensaje:

“Queridos hijos, gracias a la infinita misericordia e infatigable amor que Dios Padre Todopoderoso tiene por toda la humanidad, aquí estoy.  Hijitos, agradezco a nombre de mi Hijo a todos nuestros hijos que aman, adoran Dios Padre Todopoderoso y agradezco a todos nuestros hijos que se dedican con amor a las obras de caridad y a todos los portadores de paz.  Hijitos, en este tiempo de penitencia, invito a nuestros hijos que creen en nosotros, a meditar delante del Crucifijo. Los invito al perdón, son tantos nuestros hijos sobre esta tierra que no purifican su propio corazón perdonando sus propios consanguíneos que no están màs sobre esta tierra.  Invito a perdonar a las almas que no han perdonado sobre la tierra, liberarlas, les ruego, donen este perdón con sinceridad y arrepentimiento. Hijitos, a las intenciones ya anunciadas del Santo Rosario por la paz, por los jefes de gobierno, en este período de penitencia, invito a nuestros hijos a agregar las laudes por mañanas con las intenciones de la unión, la concordia, la paz por todos los jefes de gobierno, por el bien de la humanidad.  Invito a todos los pastores a no ser incrédulos a estas palabras que mi Hijo dona todavía sobre esta tierra, invito a la reflexión y a incentivar los propios fieles a la oración. Les agradezco por esto. Hijitos, el pecado, dia a dìa, avanza cada vez màs. El llamado de mi Hijo es èste: a la oración, a sus propios hijos, de alejar el odio, la injusticia, todo lo que es del mal. Invito a los propios hijos que no creen en nosotros, al empeño, a reflexionar, a buscar el amor, la luz de mi Hijo.  No me cansarè nunca de repetir estas palabras para la salvación de la propia alma. Gracias hijitos por lo que hacen. Invito a la perseverancia en todo lo que les ha sido donado, con confianza. Hijo mio, se te ha mostrado la misericordia de Dios Padre Todopoderoso, lo que El obra para salvar cada hijo sirviéndose de sus propios hijos. Se te ha mostrado “almas destinadas a la perdición eterna”. Gracias a vuestro “si”, al empeño, a la llamada de mi Hijo, a la perseverancia de donar oraciones el dìa de la Pascua de mi Hijo por quienes sufren en el cuerpo y en el alma, estas almas de vuestros hermanos y hermanas han obtenido la salvación eterna. Les doy las gracias por esto. Hijitos, los aquí presentes y todos a los cuales llegaràn estas palabras, les ruego no duden ni una sola palabra que mi Hijo les dona, palabras de salvación, de amor, de hermandad, no lo olviden. Los invito a perseverar con confianza en todo lo que hacen. Gracias de haber respondido a mi llamada. Nosotros estaremos con ustedes paso a paso en las alegrias y los sufrimientos. Los invito a liberarse del peso del pecado en sus corazones para tener el amor de mi Hijo. Invito a la prudencia. Gracias, gracias, gracias. Padre, Padre, tu que amas tus hijos al infinito, manda tu Espìritu Santo, sopla sobre ellos, tu Espìritu Santo de amor, de paz, de hermandad. Padre, manda tu Espìritu Santo, mándalo con potencia.  Padre te lo pido nuevamente, sopla sobre ellos. Disuelve la dureza del corazón, manda tu Espìritu Santo con potencia, aleja de ellos la maldad. Gracias Padre, gracias por tu Amor. Hoy intercederè de manera especial por todos los que sufren, me uno a la bendición de mi Hijo, extenderè mi Manto sobre cada uno de ustedes y les agradezco en el nombre del Padre, del Hijo y del Espìritu Santo. Hijios, les renuevo otra vez la palabra perdón.  Gracias, gracias, gracias. Los quiero mucho, permanezcan con nosotros y no teman”.  

(Al final del mensaje la Virgen Madre ha llorado)

 

Abril 2018

 Domingo 8 de abril de 2018 – Fiesta de la Divina Misericordia - Mensaje de la Santisima Virgen Marìa (Milàn)

 Luego de la oración del Santo Rosario por los enfermos en una capilla de Hospital, la Virgen Marìa se apareció a Michelino en oración. Vestìa una túnica dorada y al final del mensaje ha llorado.

 “Queridos hijos, en nombre de mi Hijo, renuevo a toda la humanidad, el empeño a ser portadores de paz y de perdón. Como la infinita Misericordia que Dios Padre Todopoderoso tiene por todos sus hijos, lo invito a perseverar con este compromiso: estar siempre atentos al amor de mi Hijo que està siempre junto a ustedes. Los invito a tener los corazones abiertos al Espìritu Santo, solo asì los espiritus impuros se alejaràn de toda la humanidad. En el corazón reinarà la paz. Invito a todos nuestros hijos a buscar esta paz, esta alegría, amor y perdón que mi Hijo dona. Invito a estar siempre con el alma pronta con los Sacramentos, con el alma libre del peso del pecado, solo asì podrán estar en comunión con todos los seres queridos que no están màs sobre esta tierra. “En plena comunión”: crean firmemente en estas palabras, mediten estas palabras, solo asì la voluntad del Padre nuestro, del Padre vuestro se cumplirá en cada uno de sus propios hijos, en el amor y el perdón. Los invito a perseverar. Gracias, gracias, gracias de haber respondido a mi llamada. Intercederé por cada hijo que cree, que se dona con amor, intercederé por todas sus intenciones. Padre, Padre, manda tu Espìritu Santo de paz, de amor, de perdón, mándalo con potencia; gracias Padre, gracias. Mi bendición se une a la del Padre. MI corazón està lleno de amor por cada hijo. Como Madre, a nombre de mi Hijo, les doy las gracias, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espìritu Santo.  Hijitos sean portadores de paz, se los pido con todo mi amor. Perdonen. Gracias, gracias, gracias, permanezcan con nosotros y no teman.”

 Mièrcoles 18 de abril de 2018 -  Mensaje extraordinario de la Santìsima Virgen Marìa (Milàn)

Luego de la oración del Santo Rosario, la Virgen Marìa se apareció a Michelino en oración con los fieles, con la tùnica blanca, el manto rojo y el rosario blanco. El vidente refirió que la Santìsima Virgen ha llorado por todo el tiempo que ha durado el mensaje.

"Queridos hijos, gracias a la infinita bondad, amor, misericordia y perdón de mi Hijo, aquí estoy, aquí estoy para decirles gracias.  Hijitos en esta venida extraordinaria, invito a toda la humanidad…que creen, donan, aman y obran dìa a dìa en la caridad; los invito a perseverar con el Santo Rosario por la paz. Ademàs de todo lo que mi Hijo hasta ahora ya les ha pedido a sus propios hijos, la invitación de hoy a todos nuestros hijos que no tienen sufrimiento en su cuerpo, enfermedades, de donar entre las tres y las cinco de la mañana, el primer misterio del Rosario doloroso por todas las almas inocentes que estos días han perdido su propia vida terrena por causa del odio del hombre; tres Padre Nuestro, tres Ave Marìa y tres Gloria al Padre por el dialogo, el dialogo por la paz entre los jefes de estado, de las naciones. Les agradezco por esto. Hijitos los invito a perseverar con amor y con fuerza. Les agradezco por esto. Invito a toda la humanidad: no a la indiferencia a estas palabras, si al amor que mi Hijo quiere donar. Los invito a alimentar esta llamita de luz en su propio corazón, en alegría y con amor. Les ruego, escuchen, mediten estas palabras con el corazón por el bien y la salvación de cada hijo en particular. Gracias, gracias gracias de haber respondido a mi llamada. Padre, Padre, Padre manda tu Espìritu Santo de amor, de paz, infundelo con potencia, dona la paz, dona el amor.  Gracias Padre, gracias, gracias por tu amor. Como siempre, como madre y consoladora de cada hijo, les agradezco y me uno a la bendición de mi Hijo, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espìritu Santo. Hijitos, les digo en primer lugar a los aquí presentes, además de agradecerles, les ruego que saquen de sus corazones todo lo que no es amor. Gracias, gracias, gracias. Con humildad amen y perdonen."

 

MARZO 2018

Mièrcoles 14 de marzo de 2018 – Mensaje de la Santìsima Virgen Marìa (Milàn)

Luego de la oración del Santo Rosario, la Santìsima Virgen se apareció en una visión a Michelino, orante. Ha extendido sus manos sobre cada fiel presente, como ya había hecho otras veces, y mientras efectuaba dicha acción se veìa radiante, luminosa.

Una vez pasado algún instante ha dejado el siguiente mensaje:

“Queridos hijos, gracias a la infinita bondad, amor y misericordia de Dios Padre Todopoderoso, aquí estoy.  Hijitos, los invito a perseverar con amor, con confianza en todo lo que les ha pedido mi Hijo. Hijitos, sabemos de las dificultades que cada hijo soporta. Les ruego, esto se lo pido a los aquí presentes y a toda la humanidad: “que el sufrimiento no les desaliente”. A través de la Cruz, hijitos, no se olviden, encontraràn la vida, el amor, la gloria, la luz por la eternidad.  Hijitos, no se sientan intimidados cuando encuentren con un hermano, una hermana que no cree en nosotros, que los ignora, donen una sonrisa, mirènlo bien a los ojos y hagan una oración por ellos: èsto es el amor de mi Hijo. Los invito a ser afables con sus hermanos y hermanas. Nada de envidia o celos, sì al amor. Invito a todas las familias que tienen niños pequeños, a todas las familias que esperan el don de un niño, los invito a vivir plenamente con los sacramentos, los invito a reducir el modernismo en los propios hogares y donar dialogo y amor a los propios hijos. Solo asì un dìa podrá reinar un mundo de paz, de amor.  Los agradezco por esta escucha. Agradezco en nombre de mi Hijo a todos nuestros hijos que se donan a la comunidad en las casas de mi Hijo; a las obras de bien. Les agradezco uno a uno. Los invito a perseverar con las oraciones en el dìa de la Pascua de mi Hijo, en los lugares por El indicados. Invito a la Humanidad de otros lugares, de otras ciudades a comprometerse con esto, un dìa serán plenamente recompensados; grande es el bien que hacen llegar aunque si no lo pueden saber y no es visible a los ojos en este momento. Los invito a perseverar con el Santo Monte instituido por mi Hijo. A nombre de mi Hijo les agradezco uno a uno.  Los invito en este período, al final de la jornada, a examinarse el corazón. Diríjanse a los confesionales a liberarse. El Espìritu Santo entra en sus corazones. Les agradezco por esta escucha. Hijitos, les revelo un secreto mìo:  durante mi vida terrena, cuando me sentía angustiada, durante la noche, no podía dormir, entonces me arrodillaba en el lugar donde dormía e invocaba a Dios Padre Todopoderoso; le hablaba con el corazón, con amor, cuando mi corazón estaba apenado, mi diálogo estaba siempre dirigido a El. Nadie lo sabìa.  En silencio, con el corazón abierto a El, dialogaba, oraba. Hijitos, esto se los digo, para reiterarles: todo lo que hagan, cualquier cosa, todo lo que donen, que sea con el corazón, con amor sin pesar, si no es asì no lo hagan. Dios Padre Omnipotente està junto a todos, a quien lo invoca con sinceridad. Los invito a dejar todo lo que es superfluo para vivir en esta vida terrena y donarse al amor. Un dìa el reino de la Gloria se abrirà. Gracias, gracias, gracias de haber respondido a mi llamada. Hijitos, como Madre les agradezco. Con infinito amor intercederé por sus intenciones. Tengan Fe, abandónense a la confianza, ignoren lo que es vano. Gracias, gracias. Padre, Padre, Padre, manda tu Espìritu Santo, manda tu Espìritu Santo de confianza, de amor, de concordia.  Padre, te lo pido nuevamente. Tu que los amas al infinito, a cada uno de ellos, manda tu Espìritu Santo de perdón, mándalo con potencia. Gracias Padre, gracias por lo que donas, por lo que obras. Como Madre me uno a su bendición, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espìritu Santo. Hijios, cuando encuentren un hermano que ignora estas palabras, o les dice que la oración es mucha, no hijitos, la oración nunca es mucha. Mi Hijo no obliga, recuerden, pero invita por el propio bien y de toda la humanidad.  Les ruego, perdonen, donen una sonrisa. Gracias, gracias, gracias. Invito a quien tiene a disposición estas palabras, no las abandonen, léanlas, escùchenlas en su corazón estas palabras que mi Hijo les ha mandado. Gracias, gracias, gracias.”

(En referencia a la invitaciòn que la Virgen ha hecho a toda la humanidad, es decir, de leer los mensajes que nos ha dejado en estos años, Michelino ha explicado que cada palabra que la Virgen Marìa ha dejado puede surtir un efecto, una respuesta profundamente singular en cada fiel que la hará suya, en modo que llegarà a su corazón en modo exclusivo, único. Al final del mensaje, aparecieron lagrimas sobre el rostro de la Virgen).

 Mièrcoles 21 de marzo de 2018 – Mensaje del alma de Livia Casciano (Milàn)

“Michelino, soy yo, mamà. Gracias al infinito amor, misericordia de Dios Padre Todopoderoso y a la infatigable labor del Angel de la Guardia, es asi que nuevamente mi voz llega a ti.  En nombre de Dios Padre Todopoderoso y con voz unánime de todas las Santas Almas, les damos las gracias. Hermanos, hermanas, con inmensa alegría, cada vez que Dios Padre Todopoderoso permite de mandar estas palabras oa sus propios hijos sobre esta tierra, es una Gracia Divina, no lo olviden.  Invito a todos a los que llegaràn estas palabras y tendrán ocasión de meditarlas, los invito a estar plenamente convencidos. En estos pocos años en los que Dios Padre Todopoderoso ha querido donar estas palabras por medio de la voz de un alma y con la intercesión de la presencia de la Virgen Madre Marìa, los invito a recibir con tanto amor estas palabras.  Han sido tantos los hermanos y hermanas que escuchado estas palabras han vuelto a creer en Dios Padre Todopoderoso, se han donado al amor por los propios hermanos y hermanas, a dar su “si” al amor del Padre vuestro y Padre nuestro, han sido tantas las almas que han alcanzado la Gloria Eterna gracias a la confianza de ustedes.  Hermanos, hermanas, a todos los que les cuesta creer que la voz de un alma pueda llegar a la Tierra y a todos los pastores que presentan estas dudas, los invito a creer firmemente. No se olviden que nada es imposible a Dios Padre Todopoderoso.Todos los hermanos y hermanas que obran en todo lo que se les ha dicho, a través de estas palabras, con la Confesiòn, la Santa Misa, cada vez que se donan con amor recorriendo el calvario de Dios Padre Todopoderoso, grande es el bien que llega aquí arriba, y no lo olviden, no solo el bien que llega aquí arriba, cada uno que cumple esto con amor, por su propia alma, será recompensado.  A ti Michelino, Dios Padre Todopoderoso,te ha hecho revivir un estado de ànimo por todos los años vividos en esta tierra hasta el dìa de hoy. Queridos hermanos y hermanas, cuando cada alma, en la hora que llegarà al juicio de Dios Padre Todopoderoso, en aquel momento, el alma será consciente, revivrà toda la vida terrena, todo lo que ha obrado sobre la tierra, en el bien o en el mal, nada se puede escapar. Hermanos, ustedes que han tenido la ocasión de haber escuchado estas palabras, medítenlas y anúncienlas con amor.  El anuncio debe hacerse con amor, al llamado, a creer, a volver a la Santa Misa delante el Santo Altar; la salvación puede llegar hasta el último dia sobre la tierra. No se olviden que Dios Padre Todopoderoso los espera a cada uno, con tanto amor, con la libertad que Dios ha dejado sobre esta Tierra, les ruego, no la condenen a la muerte eterna. Hermanos y hermanas, cuando son conscientes durante la jornada, que sus acciones se realizaron a modo de los hombres y no según la voluntad de Dios, pidan perdón en la Confesiòn e invoquen Dios Padre Todopoderoso con oraciones y alabanzas. El perdón será completo reconociendo los propios errores con arrepentimiento. Los invito a la humildad, al amor. Cuando se sientan afligidos por el mal, busquen el amor de Dios en el silencio. Hermanos, hermanas, son grandes dones, inconcebibles al hombre que Dios Padre Todopoderoso dona sobre esta tierra para ayudar la humanidad. Perseveren con la humildad, no se dejen intimidar por los obstáculos, porque a quien camina “en la luz y en la verdad”, nada lo puede apartar. Les agradezco y nuevamente con voz unánime, les damos las gracias a todos los aquí presentes y a todos los hermanos y hermanas que se donan al amor y a la caridad, a la acción, a la voluntad de Dios Padre Todopoderoso, les agradecemos uno por uno. Acojan estos dones y háganlos penetrar en sus corazones.Vivan estos días de penitencia con amor y corazón abierto.  Gracias, gracias. Lo repito nuevamente, no duden que un alma pueda hablar con un propio hermano o hermana, el alma vive por la eternidad, no lo olviden. Custódienlo en el amor. Cuando muere una persona querida, sabemos que el corazón se siente afligido pero los invito a ayudar esta persona con la Santa Misa, con la Comuniòn y la Confesiòn. Cada vez que se donen a esto estarán en comunión con sus seres queridos, son tantas las almas que necesitan ayuda, por esto los invito a perseverar con todo lo que se les ha donado. Retomen las palabras donadas en estos años y medítenlas. Gracias, gracias, gracias.” (Michelino ha explicado que el alma de Liva, durante el mensaje, su voz, ha transmitido una emoción y tanta dulzura, con tanto amor ha donado estas palabras).

 

JUNIO 2018

Domingo 3 de junio - Visión de la Santísima Virgen María en la capilla del hospital (Milán)

La Santísima Virgen María llevaba una diadema con crucecitas, algo que el vidente había visto solo en las apariciones en días de fiesta; ha permanecido en un primer momento en oración con los fieles, y luego de unos momentos ha hecho ver a Michelino algunos fieles que subían al Monte Santo.  El vidente ha explicado que ya en otras visiones anteriormente, la Virgen le ha mostrado la presencia en particular de algunos fieles que subian al Monte Santo y también en esta visión, ha expresado claramente una invitación a estas personas a subir el Monte Santo.

 Miércoles 6 de junio – Mensaje de la Santísima Virgen María (Milán)

La Santísima Virgen María se apareció en una visión a Michelino, en oración, con las manos extendidas hacia los fieles. No ha llorado, estaba visiblemente serena. Dopo algunos breves instantes ha dejado el siguiente mensaje:

“Queridos hijos, gracias a la infinita bondad, misericordia, perdón de Dios Padre Todopoderoso que día a día obra sobre sus propios hijos, en Su nombre les agradezco. Agradezco a todos nuestros hijos que donan con perseverancia oraciones, amor, hermandad a sus propios hermanos y hermanas, les agradezco de todo corazón.  Hijitos, para mí, cada vez que Dios Padre Todopoderoso dona esta bendición de donar estas palabras a sus propios hijos, es una alegría enorme para mí. Invito también a ustedes hijitos a dejarse penetrar en su corazón estas palabras y aceptarlas con alegría, con amor.  No lo olviden que son palabras de salvación para la eternidad.  Hijitos, hoy de manera especial, además de las intenciones que mi Hijo da a través de la oración, invito a perseverar.  Los primeros tres misterios del Santo Rosario por la paz y la unión en el mundo entero, los últimos dos misterios del Santo Rosario, los invito a donarlos con amor con la intención para las generaciones de jóvenes de hoy.  Para su conversión al amor hacia mi Hijo, al amor hacia los propios hermanos y hermanas. Les agradezco por esto.  Hijitos, el pecado avanza:  los invito a superar la pereza, a buscar el amor de mi Hijo; invito a las nuevas generaciones a dirigirse el día de la Pascua de mi Hijo con convicción a la Santa Misa; invito a perseverar con la oración, al amor, que la mente y el corazón sean siempre serenos y puros, no ofuscados con pensamientos de las tinieblas.  Hijitos, les agradezco de corazón.  Los invito siempre a amar y perdonar. 

Padre, Padre, Padre, manda tu Espíritu Santo de amor, de perdón, mándalo con potencia.  Padre, tu que tienes amor para todos, fortalece sus corazones con amor, sopla sobre ellos, manda tu Espíritu Santo con potencia.  Gracias Padre, gracias, gracias.  Mi amor materno, de madre, se une al del Padre, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.

Hijitos, perseveren y luchen por la tierra Santa del Monte Santo que mi Hijo ha instituido. Perseveren hijitos, que la justicia de mi Hijo no se ofusque a causa del hombre, con las tinieblas. Les agradezco por esta escucha.  Amen, perseveren y perdonen. Gracias, gracias, gracias por vuestro empeño constante. No abandonen todas estas palabras que mi Hijo les ha donado en estos años.  Háganlas propias. Gracias, gracias, gracias.”

 Sábado 23 de junio de 2018 – Visión de la Santísima Virgen María (Peregrinaje a Agnone, Monte Santo)

Luego de alrededor de una hora de viaje, Michelino tiene la visión de la Virgen María en oración con los fieles.  Después de esto, le ha mostrado primero algunos fieles confesándose. A continuación la Virgen Santa se apareció al pie del Monte San Onofrio siempre en oración mientras los fieles subían el Monte, siguiendo las estaciones del Vía Crucis; entre los fieles estaba también Michelino. Después de la segunda estación, apenas antes de la subida, le ha mostrado una cuenca de agua límpida, en piedra, donde se versaba el agua de un pequeño manantial. Una vez llegados a la cima, sobre la explanada, justo delante de la Cruz, le ha mostrado los fieles dispuestos en círculo que se tomaban de la mano, Michelino ocupaba su posición a un lado de la Cruz.

 Domingo 24 de junio de 2018 (Nacimiento de San Juan Bautista) – Mensaje de la Santísima Virgen María (Agnone)

“Queridos hijos, gracias a la infinita bondad, misericordia, perdón de Dios Padre Todopoderoso, aquí estoy, aquí estoy en su nombre para agradecerles, agradecer a todos los aquí presentes, a la vuestra perseverancia a la llamada de mi Hijo y a todos nuestros hijos que vuelven su corazón bien dispuesto y abierto al amor de mi Hijo, les agradezco uno a uno.  Hijitos, en este hermoso día, lleno de luz, un día especial en el que nuestros hijos recuerdan con amor San Juan y te agradezco a ti hijito (Michelino) por haber aceptado el Espíritu de mi Hijo en este día, de estar aquí. Como mi Hijo ha ya hecho ver algunos detalles, momentos de este día, pues bien, en obediencia, hoy mi Hijo por su amor y su misericordia te darà la libertad de subir junto a todos los hermanos y hermanas que te rodean en este momento. A continuación seguirás con tu obediencia.

Te ha mostrado agua viva, cristalina.  Hijitos, desde hoy, en este preciso instante, esta agua será fortalecida con el Espíritu Santo de Dios Padre Todopoderoso. Invito, queridos hijos, a los trabajadores de este lugar, a asegurarse de recoger esta agua tan valiosa.

Los invito a como recurrir a esta agua: con el corazón libre del peso del pecado, la Santa Misa y la Comunión, la confianza total.

¿Para que recurrir a esta agua? Un agua que todos pueden utilizar y para todas las enfermedades, en particular para la enfermedad mental.  Porque sucesivamente con las nuevas generaciones serán muchas las personas afectas de enfermedades mentales causadas por las nuevas tecnologías, modernismos que el hombre ha querido actuar en esta tierra. La invitación de hoy, a los nuevos padres, madres, a hacer menos uso de tecnología, los está matando. Los invito a un crecimiento sano, como la naturaleza, lo que mi Hijo les dona día a día, desde el alimento a todo lo que es necesario para los propios hijos.  Les agradezco por esta escucha, por esta participación.

Invito a la comunidad de este lugar a obrar en la escucha, a no ofuscar la luz de mi Hijo que penetra el corazón de nuestros hijos con su llamada, con sus palabras en cada parte del mundo.

Invito a custodiar este lugar con oraciones y con obras y que se aleje cualquier forma maligna. Gracias hijitos. Mi corazón, el corazón de mi Hijo, están atravesado por el pecado. Nosotros estaremos junto a ustedes, cada instante, con cada uno de ustedes. Acepten los sufrimientos y dónenlos con amor, cada alma, un día alcanza la luz por la eternidad a través del sufrimiento.  Gracias, hijitos, gracias de haber respondido a esta llamada.

Padre, Padre, Padre, infunde en los corazones de tus hijos aquí presentes tu amor, infunde tu luz en los corazones de estos hijos tuyos, sopla con potencia tu Espíritu Santo; infunde el Espíritu Santo de anuncio de tu palabra, fortalece sus corazones con la confianza en ti, en el abandonarse a ti, al amor hacia los propios hermanos y hermanas. Padre te lo pido nuevamente, haz que sus corazones encuentren paz, llena los corazones de tus hijos afligidos por el dolor, sopla con potencia.  Gracias Padre por lo que obras.

Gracias por el amor que tienes por la entera humanidad, gracias por el amor que donas a quien te aflige cada día y yo me uno a la bendición y al amor de mi Hijo, le dono mi amor materno a todos ustedes aquí presentes y a todos nuestros hijos que creen en nosotros; en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.

Queridos hijos prosigan recorriendo este calvario que mi Hijo ha traído, son tantas las bendiciones que llegarán aquí arriba y habrá una gran fiesta en lo alto de los cielos.  Perseveren, perdonen, amen. Gracias, gracias, gracias.

Conserva la serenidad en tu corazón y continua a llegar a la Cruz junto con los hermanos y hermanas, gracias, gracias, gracias de estar aquí.

Queridos hijos, estoy aquí para donarles estas pocas palabras de una gran importancia:  quien sea que utilice esta agua, además de lo que ya he mencionado antes, invito a tomarla, cualquiera sea la intención, siete gotas, no más de una vez al día y rezando la coronilla al Sagrado Corazón de mi Hijo, con fe, con abandono, y que no se utilice con derroche.

Gracias, gracias, gracias de estar a escucharme, procedan con amor, Gracias, gracias, gracias.”

 Domingo 24 de junio de 2018 – visión de la Santísima Virgen María (Agnone)

Una vez concluido el vía crucis en el Monte San Onofrio, los fieles con Michelino, ya en la cima de frente a la Cruz, han asistido a la colocación del primer ladrillo para la construcción de la “Casa de oración por el sufrimiento de las almas del purgatorio”, este es el nombre que la Virgen María ha dado al edificio que se realizará junto a la capilla con la estatua de la Virgen, a la izquierda del altar de piedra. Se rezaron las oraciones por las santas almas del purgatorio y casi hacia el final, Michelino tuvo la visión de la Virgen Madre de pie, cerca del ladrillo puesto unos instantes antes, estaba en oración con su mirada hacia el cielo. Lucia con sus cabellos apenas visibles sobre su frente debajo de su manto rojo.  Enseguida después el vidente ha podido escuchar el coro de los ángeles y ha dicho que ha sentido una profunda alegría y dulzura.